​Por primera vez desde el inicio del acuerdo administrativo del Senado, la Cámara Alta enfrenta un escenario de inestabilidad que está poniendo en duda la mesa e incluso las comisiones, a solo horas de que se deba elegir la nueva testera, y que tiene en medio de las tensiones a Ximena Rincón, por ello en todo caso, lo más complejo ha sido la incapacidad que ha tenido la bancada de senadores del Partido Por la Democracia (PPD), para definir cuál será el nombre para asumir el cargo que actualmente ocupa el UDI, Juan Antonio Coloma.

En relación a lo anterior, el miércoles pasado se reunió la bancada perteneciente al PPD, quedando empatados a 3 las opciones de Pedro Araya y Ximena Órdenes, sin que, hasta ahora, hayan definido su respectiva carta definitiva, por ello, este martes se aceptará la renuncia del Senador Coloma al cargo de la Presidencia de la Cámara Alta y trascartón se votará de forma inmediata en la mesa del Senado.

Al respecto, el senador y presidente de la UDI, Javier Macaya, aseguró que están por respetar el acuerdo, por lo que votarán por la carta del PPD, esto, siempre y cuando también se cumpla íntegramente el compromiso, mientras, el senador de la Democracia Cristiana y saliente vicepresidente del Senado, Francisco Huenchumilla, apuntó al “espíritu del acuerdo”, insistiendo en que el cupo le corresponde a su colectividad.

​Esta conformación, con una amplia mayoría de oposición, sería bastante complicado para el Ejecutivo, ya que la reforma de pensiones va a pasar eventualmente por esta comisión después de que salga de la Comisión de Trabajo este año y además, hay que considerar que la vez anterior, Ximena Rincón ya presidió Hacienda, en una gestión donde jugó un rol clave cuestionando al entonces gobierno de Sebastián Piñera la reforma de pensiones, sobre todo por el recálculo de las tablas de mortalidad, que terminaron por estancar la iniciativa. 

Bajo esta situación, el senador Gastón Saavedra, quien será el próximo jefe de bancada del Partido Socialista, apuntó por su parte que a su juicio lo correcto sería que el cupo quede en manos de Ximena Rincón, pese a los eventuales perjuicios que eso podría acarrearle al Gobierno.