exfuncionaria del Departamento de Tránsito de la Municipalidad de Linares, quien fue encontrada muerta en el sector rural de La Aguada, comuna de Longaví, en circunstancias que aún no han sido esclarecidas. Aunque el Ministerio Público y la Brigada de Homicidios de la PDI sostuvieron que se trató de un suicidio, la familia —encabezada por su hermano, Camilo Muñoz— ha insistido en que existen múltiples inconsistencias en la investigación original. Desde el primer momento, han planteado la tesis de un posible femicidio. En 2020, gracias a la persistencia familiar, el caso fue reabierto por orden de la Corte de Apelaciones de Talca, instruyendo nuevas diligencias para esclarecer los hechos. Sin embargo, aún no hay responsables ni conclusiones claras. Catherine, cariñosamente llamada “Catita”, tenía una relación con Cristián Ossandón Villalobos, compañero de trabajo, hoy inubicable y jubilado por demencia. El entorno de la víctima nunca descartó su posible participación o conocimiento de los hechos. El caso se ha transformado en uno de los más emblemáticos de la crónica policial linarense reciente. La familia continúa exigiendo que no se cierre esta causa sin una investigación rigurosa, transparente y con enfoque de género. “Vamos a agotar todas las instancias para que se sepa la verdad. Catita no se quitó la vida”, ha reiterado su hermano Camilo.
A veces se generan tensiones entre las instituciones, comentó este miércoles el Presidente Gabriel Boric a la prensa, acompañado del Fiscal Nacional, Ángel Valencia. El Mandatario se dejó ver con el persecutor en la Cuenta Pública del Ministerio Público y vertió unas palabras de conciliación tras días marcados por la tensión entre la Fiscalía y el Gobierno. Valencia de hecho, hizo un guiño al Mandatario, al relevar el mejoramiento de la Fiscalía Regional de Magallanes, algo que el aludido correspondió con una sonrisa entre la audiencia. La controversia vino a partir de la filtración de una conversación del exasesor de Presidencia, Miguel Crispi, que era parte de la escucha telefónica que solicitó el fiscal Patricio Cooper hacia el frenteamplista por el caso Procultura. La incomodidad de La Moneda escaló con la información de una solicitud que el mismo persecutor hizo para interceptar el teléfono del Presidente. Si bien tribunales desestimó la medida, la ministra Aisén Etcheverry emplazó a la fiscalía a aclarar la veracidad del requerimiento. Estamos a la espera de que sea la propia Fiscalía quien pueda aclarar si es que este trascendido que se conoció hoy es cierto o no es cierto y a partir de ahí, bueno, tomar los recuerdos que sean necesarios, dijo la ministra este lunes, en una vocería hecha pasadas las 19:00 horas. ... Fuente: Emol
exfuncionaria del Departamento de Tránsito de la Municipalidad de Linares, quien fue encontrada muerta en el sector rural de La Aguada, comuna de Longaví, en circunstancias que aún no han sido esclarecidas. Aunque el Ministerio Público y la Brigada de Homicidios de la PDI sostuvieron que se trató de un suicidio, la familia —encabezada por su hermano, Camilo Muñoz— ha insistido en que existen múltiples inconsistencias en la investigación original. Desde el primer momento, han planteado la tesis de un posible femicidio. En 2020, gracias a la persistencia familiar, el caso fue reabierto por orden de la Corte de Apelaciones de Talca, instruyendo nuevas diligencias para esclarecer los hechos. Sin embargo, aún no hay responsables ni conclusiones claras. Catherine, cariñosamente llamada “Catita”, tenía una relación con Cristián Ossandón Villalobos, compañero de trabajo, hoy inubicable y jubilado por demencia. El entorno de la víctima nunca descartó su posible participación o conocimiento de los hechos. El caso se ha transformado en uno de los más emblemáticos de la crónica policial linarense reciente. La familia continúa exigiendo que no se cierre esta causa sin una investigación rigurosa, transparente y con enfoque de género. “Vamos a agotar todas las instancias para que se sepa la verdad. Catita no se quitó la vida”, ha reiterado su hermano Camilo.
A veces se generan tensiones entre las instituciones, comentó este miércoles el Presidente Gabriel Boric a la prensa, acompañado del Fiscal Nacional, Ángel Valencia. El Mandatario se dejó ver con el persecutor en la Cuenta Pública del Ministerio Público y vertió unas palabras de conciliación tras días marcados por la tensión entre la Fiscalía y el Gobierno. Valencia de hecho, hizo un guiño al Mandatario, al relevar el mejoramiento de la Fiscalía Regional de Magallanes, algo que el aludido correspondió con una sonrisa entre la audiencia. La controversia vino a partir de la filtración de una conversación del exasesor de Presidencia, Miguel Crispi, que era parte de la escucha telefónica que solicitó el fiscal Patricio Cooper hacia el frenteamplista por el caso Procultura. La incomodidad de La Moneda escaló con la información de una solicitud que el mismo persecutor hizo para interceptar el teléfono del Presidente. Si bien tribunales desestimó la medida, la ministra Aisén Etcheverry emplazó a la fiscalía a aclarar la veracidad del requerimiento. Estamos a la espera de que sea la propia Fiscalía quien pueda aclarar si es que este trascendido que se conoció hoy es cierto o no es cierto y a partir de ahí, bueno, tomar los recuerdos que sean necesarios, dijo la ministra este lunes, en una vocería hecha pasadas las 19:00 horas. ... Fuente: Emol